Por algunas cuestiones, me he visto algo privada ultimamente de una de mis más grandes adicciones y bebidas favoritas: El café. Tengo muchas cosas en la cabeza, mucho de qué hablar y sin manera de decirlo, poquísimas cosas me ponen de buenas ahora y una de ellas es mi adorado café, así que por el momento, para salir un poco de la desdicha, me conformaré con dejar aquí un par de ideas junto con unas imágenes que encontré acerca de esta maravillosísima bebida:
"El café despeja la cabeza. Con la cabeza despejada se trabaja muy bien. Trabajando muy bien se obtienen ganancias, las ganancias producen dinero, el dinero produce buen humor, el buen humor produce felicidad. El que es felíz se halla dispuesto para el bien, las buenas obras conducen al cielo, por lo tanto: El café es el camino al cielo."
Ja lo sabía!!
Fuente del sabio pensamiento anterior: Antología de la superación personal, de Juan Antonio Razo, editorial Diana.
El gran escritor frances Honorè de Balzac tomaba hasta treinta tazas de café en un día. Esto le aceleró la muerte y él lo sabía. Dicen que unas de sus últimas palabras fueron: "Mi muerte es un asesinato, y el asesino han sido las cien mil tazas de café que he tomado en los últimos diez años de mi vida"
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